viernes, 29 de agosto de 2014

2. ¿Por qué nos creó Dios?

Dios nos creó por su amor libre y desinteresado.

Cuando un hombre ama, su corazón se desborda. Le gustaría compartir su alegría con los demás. Esto le viene de su Creador. Aunque Dios es un misterio, podemos sin embargo pensar en él al modo humano y afirmar: nos ha creado a partir de un “desbordamiento” de su amor. Quería compartir su alegría infinita con nosotros, que somos criaturas de su amor.

1. ¿Para qué estamos en la tierra?

Estamos en la tierra para conocer y amar a Dios, para hacer el bien según su voluntad y para ir un día al Cielo.

Ser hombre quiere decir: venir de Dios e ir hacia Dios. Tenemos un origen más remoto que nuestros padres. Venimos de Dios, en quien reside toda la felicidad del Cielo y de la Tierra, y somos esperados en su bienaventuranza eterna e ilimitada. Mientras tanto vivimos en la tierra. A veces experimentamos la cercanía de nuestro Creador, con frecuencia no experimentamos nada en absoluto. Para que podamos encontrar el camino a casa, Dios nos ha enviado a su Hijo, que nos ha liberado del pecado, nos ha salvado de todo mal y nos conduce infaliblemente a la verdadera vida. Él es “el camino y la verdad y la vida” (Jn 14,6).

Prólogo de S.S. Benedicto XVI


Queridos jóvenes amigos:

Hoy os aconsejo la lectura de un libro extraordinario. Es extraordinario por su contenido pero también por el modo como se ha formado, que deseo explicaros brevemente, para que se pueda comprender su singularidad. 

Youcat tiene su origen, por decirlo así, en otra obra que se remonta a los años 80. Era un período difícil tanto para la Iglesia como para la sociedad mundial, durante el cual surgió la necesidad de nuevas orientaciones para encontrar un camino hacia el futuro. Después del Concilio Vaticano II (1962-1965) y en el nuevo clima cultural, numerosas personas ya no sabían correctamente en qué debían creer propiamente los cristianos, qué enseñaba la Iglesia, si es que podía enseñar algo tout court, y cómo podía adaptarse todo esto al nuevo clima cultural. El cristianismo en cuanto tal ¿no está superado? ¿Se puede todavía hoy ser creyentes razonablemente? Estas son las preguntas que se siguen planteando muchos cristianos.